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30 de junio de 2008

Alejandro Olmos

“O se está al servicio del país en contra de la deuda externa,
o se está al servicio de la deuda externa en contra del país”

Alejandro Olmos

En el año 2001 sucedió el "Argentinazo" y varias personas que hasta ese momento nunca habíamos participado en política salimos a la calle a protestar. La pobreza y desocupación crecientes habían llevado a un estado de descontento tal que el presidente democráticamente elegido, Fernando De la Rúa, se vio obligado a renunciar.
¿Qué había llevado a esta situación? La necesidad del Estado Argentino de pagar no ya la DEUDA EXTERNA sino los intereses de la misma.
En esos días el tema de la DEUDA estaba en boca de todos. Muchos sentíamos que era injusto pagar por una deuda que no habíamos contraído.
El 23 de diciembre con sorpresa y emoción escuchábamos que el presidente designado por la Asamblea Legislativa Adolfo Rodríguez Saá anunciaba la suspensión del pago de la deuda externa, algo que solo dos países habían hecho en América latina con anterioridad Perú en 1985 y Ecuador en 1999. Rodríguez Saá prometía que todo ese dinero sería utilizado "sin dudar y sin excepción" para crear puestos de trabajo.
Fue en ese verano caliente que supe de ALEJANDRO OLMOS.


1- ¿Quién fue este ilustre desconocido?
2- ¿Qué tiene que ver él con la DEUDA EXTERNA ARGENTINA?
3- ¿Por qué una Escuela con orientación en Ciencias Sociales merecería llevar su nombre?

Mi propuesta es que busquen información sobre su vida y obra, e intenten responder a estas preguntas, vale la pena.
Les doy algunas pistas: Daniel Marcos padre de una de las alumnas de la Escuela es director junto con Alejandro Olmos Gaona (hijo), de una publicación periódica digital que se llama PALABRA ARGENTINA
[1], donde se cuenta bastante de la vida y obra de Alejandro Olmos y de la Deuda Externa.
Recomiendo además las siguientes películas: “LA MAYOR ESTAFA AL PUEBLO ARGENTINO” de Diego Musiak, “DEUDA” de Jorge Lanata y “LA DEUDA” de Silvia Corral.
Considero que su obra merece ser recordada y continuada y aunque su nombre no sea el elegido, la búsqueda siempre es una buena excusa para conocer las causas profundas de la dependencia Argentina.
[1] http://www.palabraargentina.com.ar/

Por: Patricia González Tizón

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